Fuimos

Todos alguna vez fuimos -el llanto-. Los ratos libres y el clavo reparador de algún corazón roto. El "no me importa" de alguna mente negadora. El enojo y el ceño fruncido. La proyección y el espejo. La causa de alguna piel de gallina. “La minita que me cogí”,”El pibe que no funcionó”. La decepción. El protagonista de una charla. El nombre camuflado durante un partidito de play. La actriz de reparto angustiada con su ego. El actor envidioso cansado de hacer bolos. Todos fuimos la cuenta pendiente de un deudor arrepentido. La risa de un día gris. Un whatsapp no respondido. El mejor recuerdo. La anécdota y la mentirita piadosa. La paz de un alma perturbada. El desenlace menos deseado y el secreto mejor guardado. El descarte y lo más importante. Un suspiro resignado. El portazo abrumador de una pelea sin sentido. El típico error de arrastre masoquista. La foto de la mesita de luz que termina en un cajón. El abrazo más deseado y la ira incontrolable. El "no lo quiero ver nunca más". La admiración y la verguenza. Las expectativas incumplidas. La duda que llena de miedo. Un dolor de cabeza y el deseo reprimido. La ex-novia olvidada. El chico que chapa mal. El "le tengo ganas" y el "no sabes lo que me hizo". La relación inolvidable. El encuentro menos pensado. La sorpresa de una cabeza resignada y el grito de alguna garganta sin voz.
Lo alucinante de este mundo, es que gira. Y en esta rueda cambiamos de lugar. A veces estamos arriba y otras, aprendemos. Vamos pasando por todos los papeles, porque así somos y confirmamos que estamos -vivos

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